Fechas tiranas

Uds. ya saben que yo adoro a El Santi, pero esta es una época del año en que se pone particularmente pavo, puede ser por la resaca que va del 23 de diciembre hasta el 3 de enero, o que deja fluir su ser naturalmente. Yo no lo sé, pero trato de averiguarlo hace quince años.

Es en esta altura del año es cuando El Santi destaca su máxima expresión, y deja todo para último momento. Por ejemplo, hoy 28 el arbolito esta en una caja en el ático y los posibles regalos para La Gaby siguen en el tintero, esperando que los Reyes Magos cumplan. La cena del 31 y los comensales están por ver. Todo esto sucede porque dice que yo soy demasiado predicativa y como para mí el arbolito se arma el 8 de diciembre, se arma Pesebre y tenemos que decorar todas las ventanas, me ha suspendido de esta labor. Solo deja su menú y yo tengo que cocinar. Es la parte del año en que él manda y yo acato, porque al pobre tipo hay que darle un “changuí”.

El Santi entra en tal estado de letargo o de euforia, que ni un programa de”BBC Mundo” ni “NatGeo” puede ver, porque le encuentra la similitud a todo. “A ver gorda, como es posible que ese pingüino encuentre a su pingüino en tal quilombo, si yo no te puedo encontrar en Tienda Inglesa”?” , “era en este canal que los lobos marinos le hacen el “quiquicho a merrycrismas” a los pingüinos?”. Todo pensado en una Noche Buena, y continuación de Navidad.

Ni que hablar que se vienen las vacaciones, y yo, ilusa pregunto…. A donde vamos? Y la respuesta clásica “dale tiempo al tiempo”. Claro yo tengo mucho tiempo para pensar y como no hago nada tengo que sacar algo de la manga para aprovechar ese placer que son las vacaciones….. todo yo, todo yo! (hasta decido la fechas!)

Este año ha sido peor, porque tiene a “El Enano” o como lo llamo yo, “Watson”, y ahora solo piensa en ir a buscar piezas a Cerillos, Santa Clara o Caraguatá…… al menos puedo ligar algún pique si me da tiempo de armar las cañas de pescar.

Pero igual así lo amo, y ya está, hasta que la muerte nos separe o hasta que nos choquen al Enano Watson (el apellido es por lo elemental!). No sé que vamos a comer el 31 ni nada, solo sé que a estas alturas de mi vida, ya no sé nada excepto mecánica automotriz alemana de mi edad.

 

Nota del Redactor en Jefe (El Santi): Todos los conceptos vertidos en el presente artículo representan la opinión de la escritora, y no se corresponden con la realidad. A mi me tiene de "che pibe" y me mandonea. Síganme los buenos!!!