No hay nada más divertido que vivir con El Santi. Si no está
haciendo chistes, está tramando algo para que te rías, a pesar de su humor
denso, demasiado denso para quienes no lo conocen.
Pero tiene otras virtudes,
como salir hablándote sobre el “Principio de Incertidumbre” en medio de un
capítulo de “Lilyhammer”. Pero ojo, no
me viene a hablar de sus dudas sobre que vamos a hacer en las próximas
vacaciones o que vamos a cenar esta noche. Me viene con planteos y fórmulas
(con garabatos, porque no existen las teclas) sobre física cuántica, y se enoja
furiosamente si le planteo que la física cuántica consiste en contar a un
montón de profesores de educación física en un gimnasio.
Que si Planck, que si un tal Heisenberg, que si esto es la
física moderna, que la chimenea de casa quedaría hermosa son un cuadro de los
diagramas de Feynman. Yo sólo lo dejo pasar; para mí la física no debe ser tan
profunda, solo que “una acción recibe una reacción de la misma intensidad en
sentido contrario”, que es lo único que aprendí de un tal Newton, y que para mi
gusto se emplea en el codazo del bus, o en la chanchada que recibirá alguien
que te fastidió.
El Santi ya no espera más la reacción de la luz, ni de la unidad
de tiempo y de la potencia. El pobre se conforma con una mirada atónita, al
mejor estilo “Gato Felix”, con los ojos bien grandotes, y expresando admiración
(pero en su principio de incertidumbre, debe de saber que me importa un rábano
y un pepino juntos, pero no tiene la certeza absoluta).
Si alguno de Uds. es ingeniero, le interesa la física, son
aficionados de la astronomía, si alguno de Uds. se tomó de leer http://www.lauruguayaherrante.blogspot.com.uy/2014/07/distribucion-de-la-materia-oscura-en-el.html,
tengo que lamentar y decirles que de aquí no van a aprender nada de física,
pero algo de vida, puede ser, pero si quieren investigar al respecto, les dejo
esta fórmula: 
Que la disfruten!
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